lunes, 30 de junio de 2014

Capítulo 2 - Marie Evans: Hoy puede ser un gran día.

Publicado por Alba Alexander en 11:00 0 comentarios
Era un cálido día de esos soleados, hacía buen tiempo ya que el calor no apretaba.
Brenda y yo caminábamos en bicicleta, mientras la brisa del mar, muy cercana a nosotras nos rozaba en nuestros cuerpos. Teníamos mucho tiempo libre, por lo que Brenda, recién salida de un par de vuelos, quería tomar un descanso con su más apreciada familia y con sus seres queridos. 
Decidimos descansar, ir a un sitio donde sentarnos y charlar, las horas se pasaban y yo aún seguía a su lado, aprovechando lo máximo posible.

- ¡Que lindo día! Ha merecido la pena levantarse y ver que es un día bueno, soleado, perfecto.. - dijo Marie muy entusiasmada.
- Estos días te cambian la vida, te sacan una sonrisa, y, por muy pocos planes que tengas en un solo día, debes aprovecharlos, si no tienes ningún plan, siempre es divertido ir a dar un paseo con alguien a quien aprecias. - respondió Brenda.
- Aunque, es una pena que Charles esté muy ocupado en el hospital, son días de duro trabajo.
- El hospital es siempre muy duro, pero Charles hace una labor excelente. 

Me encantó poder hablar con ella, saber que tenía a alguien con quien hablar, con quien desahogarme y con quien pasar el día tranquilamente. Pues seguimos caminando, mis conversaciones con Brenda se extendían, era alguien muy especial en el sentido de que como mi segunda madre que era, éramos muy amigas y compartíamos cada momento juntas, lo que me hacía sentir aún más especial, y por tanto, más querida.

No queríamos volver a casa, pero el sol estaba apunto de esconderse y empezaba a refrescar un poco, por lo que llegamos a casa y encargamos unas pizzas y preparámos el salón para ver un par de películas. 

De repente, un coche se oía, Charles llegaba del trabajo.
- ¡Hola, cariño! ¿Qué tal te ha ido en el trabajo? - Brenda besaba su frente y le saludaba de lo más cariñosa posible.
- Hola cielo, ha sido un día muy duro, por lo que estoy agotado. ¿Qué han hecho mis dos niñas, cómo estáis? - respondió, entre bostezos después de un largo día.
- Hemos ido de paseo por la playa en bicicleta y luego, hemos parado a tomarnos unas bebidas, ahora, vamos a encargar unas pizzas y a ver un par de películas. ¿Te apuntas papá? - dije muy contenta.
- ¡Bien cariño, me apunto al plan! - aún cansado, Charles decidió que estaría con nosotras, su novia, y su apreciada hija.

Sollozos y bostezos empezaban a escucharse a lo largo de la noche, ya habíamos visto dos películas, era tarde, debíamos dormir. Aunque.. antes de lo habitual Charles se quedó dormido entre mantas, ocupando todo el sofá, nosotras, en el suelo seguíamos riendo, eran dos películas muy graciosas al igual que la baba de Charles que caía mientras dormía tan profundamente.

Entre sonrisas, todo era mejor, no importaba el plan, ni el lugar, ni el momento, ni nada en absoluto, lo que realmente importaba es la presencia de esas personas que te apreciaban, y que apreciabas. Personas que por muy escasos o aburridos planes que tuvieran, siempre junto a ellos/as iban a ser planes muy divertidos, ya fueran amigos, familiares o cualquier tipo de persona. Pero, he aprendido que en esta vida, el mejor plan que hay es la felicidad, y que hay que saber apreciarla junto a los tuyos.

Capítulo 3 - Marie Evans: El lugar de los encuentros.

domingo, 29 de junio de 2014

Capítulo 1 - Marie Evans: La era de la buena vida.

Publicado por Alba Alexander en 3:53 0 comentarios
"Marie, esto no lo decides tú, pero debes motivarte, debes salir ahí afuera y demostrar que puedes con ello."

- ¡Marie, Marie! - escuché el eco en un recién despertar.
- ¿Qué ha pasado, qué hago aún aquí? - me levanté entre bostezos.
- Cariño, estás bien, tan solo ha sido un sueño, ahora debes despertar. - escuché una voz femenina.
- Br..Brenda, ¡eres tú, que sorpresa! - dije muy alegre pasando mis dedos por los ojos y aún con un poco de sueño.

Brenda, esa chica de ojos marrón café, tan simpática y agradable. Sí, ella es la novia de mi padre adoptivo Charles, quien me acogió cuando era una simple niña que buscaba sonreír. Ella acaba de venir de un sitio lejano, es una mujer muy trabajadora y responsable, ya que ahora tiene en que volcarse, su vida, su apreciado novio, su trabajo y su familia a quien a partir de meses anteriores, puede sacar adelante, es una bella mujer que siempre está viajando, de Norte a Sur, horas y horas, trabajando muy duro, le encanta su trabajo.

- ¡Aquí me tienes, la misma! esta semana la tengo libre y aprovecharé todo el tiempo que haga falta, con vosotros. - dijo Brenda con mucha felicidad.
- ¡No sabes cuánto me alegra Brenda! - la abracé fuertemente, ya que acababa de llegar de varios vuelos.

Cuanto me alegraba ver de nuevo la familia unida, no era mi verdadera familia, pero para mí era como si lo fueran, está claro que eran incomparables, que mi verdadera familia ahora no está y que está ahora es más que eso porque son mi apoyo y porque en duras circunstancias, me acogieron y lucharon por mi como si se tratara de alguien más de la familia, aún así, yo siempre recordaba a mis padres.

Ahora, quiero dar un giro en mi vida, quiero tener una meta, algo por lo que luchar, ¡Quiero ser como Brenda, tan linda, tan responsable, tan.. tan..! - no tenía palabras para describirla, era para mi una mujer perfecta, que a pesar de todo, siempre estaba sonriente.

- Creo que deberíamos ir a dar un paseo, Marie, ¡levanta, hoy puede ser un día maravilloso! - dijo Brenda, muy activa, sin pensarlo ni un sólo segundo más, cogí de su mano y me levanté.

Capítulo 2 - Marie Evans: Hoy puede ser un gran día.

jueves, 26 de junio de 2014

Marie Evans - El regreso de un camino correcto.

Publicado por Alba Alexander en 11:40 0 comentarios
Un día nublado cualquiera en un Parque de Sadovaya Street, semanas, días, meses, años después..

Tantos recuerdos inundaban mi mente. Recuerdos, que no se iban, que formaban parte de mi pasado, pero, que aún así quedaban marcados en mi mente, en mi corazón, en cada lugar a donde me dirigía, cada momento era un segundo de mis más marcados pensamientos, de mi pasado, un pasado que me dejó huella.

"Ha pasado mucho tiempo y aún así, sigo viva, sigo recordando, y el viaje aún está por continuar, esto no es más que el principio, EL PRINCIPIO DE UNA NUEVA ERA." - escribía en mi diario, expresando cómo me sentía y el por qué. 

Jamie, Bryan, dos hombres que marcaron y salvaron mi vida, que estuvieron hasta que un día, algo se los llevó, pero estoy segura que ahí arriba estarán bien protegidos y que nada les causará sufrimiento.

Charles, quien desde el primer momento que me vio, no quiso separarse de mi, quien me acogió y quien estuvo siempre a mi lado para hacerme la más feliz de las niñas, ahora, él es mi papá, mi padre adoptivo, mi ángel de la guarda.

¿Y qué puedo decir de mis padres? desde el cielo, ellos me protegen día a día y sé que me cuidan, por eso, he sabido salir adelante, afrontar mis problemas, asumirlos, corregirlos.. 
Y he vuelto a sonreír, he vuelto a ver la luz, gracias a mi paciencia y a mi ser luchador que llevo dentro de mi. Está claro que he seguido por el buen camino, el camino correcto, el de mi nueva vida, ahora empieza el primer capítulo de mi nueva vida y prometo volver a ser feliz, se acabó sufrir, es hora de sonreír una vez más por los que te quieren y por los que quieres.

Mi camino comienza. 

Capítulo 1 - Marie Evans: La era de la buena vida.